Chismes, credibilidad y fake news
Luis Ernesto Morales Pinto
25 de Agosto, 2020
Actualmente vivimos en una sociedad en la que la verdad pende de un hilo, distinguir entre lo falso y lo cierto es un obstáculo cada vez más complejo, especialmente en política. La existencia de formas sistemáticas y estructuradas por las cuales las redes sociales han tenido un auge en los últimos años y alterado los medios de información a nivel global. En Guatemala el chisme y las formas informales siempre han sido medios para informarnos desde los asuntos personales de otros, hasta el quehacer político nacional. La importancia de la tradición oral en nuestra cultura se refleja en cómo hemos comunicado nuestra historia y seguimos transmitiendo nuestra actualidad. Los siguientes párrafos se enfocan en cómo las redes sociales han transformado la forma de recibir, transmitir y entender la información, tanto para gobernantes como gobernados.
Las fake news han sido un foco de atención desde que el término fuese popularizado por Donald Trump en su campaña electoral como una forma de desacreditar a quienes criticaban su candidatura. En Guatemala ya conocíamos las fake news de distintas formas, desde “casaca” hasta “chirmol” y muchos otros guatemaltequismos. Las noticias falsas no son un fenómeno nuevo, pero la cantidad que existen actualmente y su alcance sí representan un desafío que nunca antes se había tenido. La cantidad de información que se genera diariamente en el mundo y la accesibilidad global a internet han creado que el consumo de noticias sea masivo, pero más variado, al facilitarse la creación de fuentes de información. En redes sociales, cualquiera puede fungir como periodista.
Las redes sociales han sido la fuente de información predilecta por gran parte de la población, no solamente durante el tiempo que ha durado la crisis sanitaria mundial, sino que ya tenía un peso relevante desde la llegada de millones de usuarios a estas plataformas desde hace una década. Los motivos se pueden atribuir a su amplio alcance, su nulo o bajo costo y su presentación más atractiva que los medios tradicionales. La capacidad de compartir estas noticias abre la puerta a que llegue no sólo a un grupo de amigos o familiares, sino que se extienda exponencialmente a otros. La idea de compartir estas noticias, ya sea por agrado o indignación, suele hacerse de forma inmediata, dejando a un lado el escrutinio necesario para desvelarse si es o no una noticia creíble.
A diferencia de los errores que pueden existir dentro de los medios de información, las fake news traen consigo una intencionalidad a veces explícita para salir a la luz. Desacreditar a otros medios o a la persona a quien se dirijan las noticias falsas como un funcionario, son los principales objetivos que tienen las agendas de desinformación. Crear dudas sobre todo hasta el punto que no se puede confiar en nada e incluso se llegue a la desobediencia o linchamientos públicos en redes sociales. Lastimosamente las consecuencias pueden llegar a niveles muy serios, poniendo en peligro la vida de las personas. Ya no son simples herramientas de desprestigio, sino bases de fondo para las acciones de las personas.
La tecnología avanza a un paso mucho más acelerado que el paso en el que se desarrolla nuestra sociedad. Los mecanismos de respuesta ante la existencia de información falsa que confunde la opinión pública son aún inexistentes. La legislación para poder evitar la información falsa debe de tener los elementos para aplicarla no sólo ahora, sino también de divisar cómo puede evolucionar en el futuro. Además se necesita de una sociedad civil que pueda comprender las diferencias entre lo falso y verdadero, una ciudadanía comprometida con la importancia de la información pública en las sociedades democráticas y que reconozca la necesidad de defenderla.
Fuentes:
Guerrero, Juan José. (27 de mayo de 2019). Noticias falsas que provocan la muerte. Recuperado de: https://www.plazapublica.com.gt/content/noticias-falsas-que-provocan-la-muerte
Gramajo, Silvio. (15 de julio de 2018). Las fake news y su efecto en el espacio público. Recuperado de: https://www.plazapublica.com.gt/content/las-fake-news-y-su-efecto-en-el-espacio-publico
El autor es Licenciado en Relaciones Internacionales, fiel creyente de la democracia y sus falencias. Estudios y participaciones en conferencias en el extranjero. Experiencias laborales variadas en investigación, comercio exterior, diplomacia y escritor de artículos de opinión. Aficionado del fútbol y todas las dinámicas que lo rodean.